Jin Shin Jyutsu "El arte de armonizar la energía del cuerpo"
Jin Shin Jyutsu es un arte antiguo de armonización de la energía de vida en el cuerpo, forma parte de la sabiduría innata del ser humano. Sin embargo, su redescubrimiento se debe al maestro japonés Jiro Murai a principios de 1900.
Jin Shin Jyutsu se podría traducir como el arte de armonizar la energía vital del cuerpo. Es una forma sencilla de desbloquear y armonizar nuestra energía vital empleando las manos como si fueran los cables de una batería. Es una disciplina muy sencilla, que se puede aprender para practicarla sobre uno mismo y que permite recuperar la sensación de control sobre la propia salud.
Decía Aristóteles que aprender es recordar, ya que se trata de una sabiduría innata, y el Jin Shin Jyutsu (JSJ) está muy relacionado con este pensamiento porque se trata de una sabiduría que se trasmitió de generación en generación durante miles de años y que los antiguos utilizaban para curarse a sí mismos y a los demás. Luego desapareció y fue recuperado por un sabio e investigador japonés, Jiro Murai, a comienzos del siglo XX; sin embargo, según antiguos escritos de los Archivos del Palacio Imperial en Japón, JSJ ya era conocido antes de Moisés, Buda y el Kojiki (Registro de Cosas Antiguas de Japón, 712 d.C.).
Su expansión por Occidente tuvo lugar porque, aunque Jiro Murai nunca salió de Japón, ofreció a una de sus discípulas, Mary Burmeister, llevar el conocimiento del JSJ a Occidente. Mary Burmeister, quien conoció a Jiro Murai en Japón a finales de la década de 1940; quedó fascinada por su sabiduría y aprendió de él durante 12 años, y en 1960 empezó a enseñar Jin Shin Jyutsu en Estados Unidos.
En el campo de la salud integral, la naturaleza del hombre no se puede concebir separada del universo que nos rodea, somos parte del él: un microcosmos dentro de un macrocosmos. Por eso, la afirmación de que todo en el universo es energía, no solo está formulada ya por la ciencia, sino para entender que las personas también somos energía.
Imagen: Jiro Muray fundador de Jin Shin Jyutsu (Japón 1886-1960)
"Basado en un conocimiento antiguo del cuerpo y la creación, Jin Shin Jyutsu fue transmitido oralmente de generación en generación y había virtualmente desaparecido en Japón cuando fue redescubierto a principios de 1900 por Jiro Murai, un filósofo japonés. Siendo joven, Murai contrajo lo que se diagnosticó como una enfermedad terminal. Le pidió a su familia que le llevara a las montañas y le dejara en soledad durante 7 días."
"En un estado febril, Murai imaginó sabios en meditación espiritual usando posiciones de dedos que él se aplicó a sí mismo mientras entraba y salía de un estado de consciencia. El séptimo día estaba completamente sanado y prometió dedicar el resto de su vida a estudiar la conexión entre este asombroso descubrimiento y los mudras que había usado."
Antes de Lavoisier, las leyes físicas de la termodinámica, Einstein, Tesla, la física cuántica…, las diferentes culturas y filosofías habían integrado el aspecto energético e incluso nombrado a la energía que pasa por el cuerpo humano: en China Qi, en Japón Ki, en India Prana, en la antigua cultura griega Neuma...; porque ya se contemplaba cómo en el ser humano, los órganos, las emociones, los pensamientos, etc., son formas de energía vital y cómo el desequilibrio o bloqueo continuado de esta energía puede dar lugar a la enfermedad.
Científicos, como el físico alemán Fritz Albert Popp, han constatado cómo en el ser humano se dan multitud de procesos eléctricos, magnéticos y fotónicos y la investigación médica actual ya ha comprobado que campos magnéticos de muy baja intensidad y frecuencia pueden estimular la curación de distintos tipos de tejido.
Jin Shin Jyutsu se encuadra en esta concepción del ser humano y en el poder innato que tenemos para reequilibrarnos con unas sencillas técnicas manuales.
El fundamento del Jin Shin Jyutsu es nuestro propio instinto. Cuando sentimos un dolor ponemos la mano encima. Además, en JSJ, la expresión básica de la energía vital es la respiración.
La energía vital que circula a través de nuestro organismo se desplaza por diferentes canales conocidos como flujos, que unifican todo el cuerpo. A cada lado de este, existen 26 localizaciones denominadas, cerraduras de energía de seguridad (CES), que actúan «como interruptores» que permiten desbloquear la energía estancada. Si se producen bloqueos en las CES, se interrumpe el flujo de energía, lo que se traduce en la aparición de síntomas físicos y anímicos.
Video: Usui Reiki Ryoho Gokai - Inamoto Hyakuten Sensei (Komyo Reiki Do)
El bloqueo continuado de la energía vital puede llevar a la enfermedad, que en JSJ, se denomina «etiqueta». Nos podemos encargar de cualquier «etiqueta» liberando la energía estancada.
La investigación médica actual ya ha comprobado que campos magnéticos de muy baja intensidad y frecuencia pueden estimular la curación de distintos tipos de tejido.
Según JSJ, estos estancamientos se producen debido a cinco actitudes (emociones estancadas) básicas, las cuales están relacionadas con cada dedo de la mano: Preocupación, Miedo, Ira, Tristeza y Pretensión.
Jiro Murai descubrió que en cada uno de nuestros dedos de las manos y de los pies empiezan y terminan varios flujos de energía que discurren por todo el cuerpo siguiendo unos patrones concretos. Cada dedo está vinculado a 14.400 funciones corporales por lo que, sujetar los dedos o practicar los mudras (mudra viene del sánscrito y significa «símbolo» o «sello»), es ya una poderosa forma de armonizar nuestra energía vital. En JSJ son ocho los mudras, diferentes posturas de las manos que dirigen la energía por diferentes zonas de nuestro cuerpo.
Práctica de Jin Shin Jyutsu:
La práctica del Jin Shin Jyutsu consiste en tocar al mismo tiempo los dos puntos de una CES o combinar dos CES. Para ello se colocan los dedos o la palma de la mano sobre esos puntos todo el tiempo que sea necesario hasta que se aprecia que los síntomas físicos, emocionales o mentales se alivian.
Si se elige solo un par, se puede hacer que el contacto dure de tres a 15 minutos. Si se quiere realizar un tratamiento general en siete pasos, por ejemplo, se puede dedicar media hora si a cada paso se le reservas cuatro minutos. A menudo se siente un cosquilleo o una pulsación suave, como si se estuviera actuando sobre los polos negativo y positivo de una pila que estás recargando.
No hay que temer en equivocarse al elegir las cerraduras. Aunque presiones un punto que no es el más adecuado para tratar el problema que te afecta o afecta a otra persona, no se van a producir efectos negativos. Al contrario, el cuerpo sabe cómo utilizar ese flujo, solo hay que relajarse y dejarse llevar por la intuición.
Burmeister explica que en el cuerpo existen puntos donde la energía se concentra y que actuando sobre ellos se puede desbloquear, lo que elimina molestias y favorece la salud.
Técnicas de Jin Shin Jyutsu:
Sujeción de dedos: La manera más sencilla de hacer Jin Shin Jyutsu es mediante la técnica de sujeción de dedos. En cada uno comienzan y terminan flujos energéticos unidos con el resto del cuerpo. Al sujetarlos, se equilibran esos flujos y con ellos los pensamientos y los sentimientos que están relacionados. La sujeción relaja y, a la vez, vitaliza.
El gran abrazo: Es un ejercicio breve y de mucha fuerza. Se puede hacer cada vez que se necesite tranquilizarse o recuperar energía, a uno mismo o guiar a otros. Solo hay que cruzar los brazos y colocar las manos bajo las axilas de modo que los pulgares queden fuera y orientados hacia arriba. Cierra los ojos, relaja los hombros y el cuello. Inspira profundamente y espira. Pronuncia mentalmente «inspirar, espirar, uno». Cuenta así hasta 36 respiraciones. No prestes atención a los pensamientos que llegan.
Refuerza el «flujo central principal»: Este es, según el Jin Shin Jyutsu, el primero que se forma en el ser humano y el que hace posible la vida. Jiro Murai lo llamaba «la gran respiración vital». Se puede reforzar en siete pasos, manteniendo cada posición de 2 a 5 minutos:
1.- Coloca la mano derecha sobre la parte alta de la cabeza y la izquierda sobre la frente. 2.- Mantén la mano derecha en su sitio (permanecerá ahí hasta el séptimo paso) y tócate la nariz con los dedos de la izquierda. 3.- Coloca la mano izquierda sobre el hoyuelo del cuello entre las dos clavículas. 4.- Baja la mano hasta el centro del esternón, sobre el corazón. 5.- Pon la mano unos tres dedos por encima del ombligo. 6.- Bájala hasta el pubis. 7.- Coloca la mano derecha que estaba en la cabeza sobre la rabadilla. Mantén la mano izquierda sobre el pubis.
Técnicas rápidas más comunes:
Para conseguir más armonía. La palma de la mano nos une a la gran fuerza vital, nos regala vitalidad y equilibrio. Tócala con los dedos de la otra mano el tiempo necesario.
Para lograr más equilibrio emocional. Sujeta el índice hasta que sientas como late, de 2 a 5 minutos. Puedes contar las respiraciones (hasta 36, por ejemplo). Alterna con los dedos de ambas manos.
Para reducir el estrés. Cruza los brazos y sujeta («recarga», en la terminología del Jin Shin Jyutsu) la parte alta de los brazos (CES19 alta).
Para controlar el miedo. Forma un círculo colocando la punta del pulgar sobre la uña del anular. Mantén durante 36 respiraciones y cambia de mano. Concéntrate en la respiración.
Para ganar confianza. Sujeta el dedo anular cuando quieras alejarte de la tristeza, de las quejas y de la sensación de impotencia. Te ayuda a ganar seguridad.
Para dormir mejor. Presiona el CES18 (talón de la mano) para tranquilizarte y conciliar el sueño por la noche. Puedes hacerlo en una mano o en las dos. Respira lentamente.